miércoles, 16 de diciembre de 2009

Como cada noche, Carolina se puso el vestido mas corto que encontró, los tacones mas altos que tenia y se pinto los labios de rojo pasión. Salió con una sonrisa fingida y metió en el bolso falsas ilusiones. Esta noche había quedado con un cliente habitual, se llamaba Pablo y era el jefe de una empresa de Madrid. Estaba casado y tenia dos hijos, una niña de 12 años y un niño de apenas 4 años. Carolina nunca quiso saber nada mas sobre su vida, ya que le parecía rastrero que un padre fuera capaz de hacer eso. Él le había confesado que nunca quiso a su mujer, que nunca le fuel fiel. Que ella le ponía más. Pero Carolina solo le aguantaba por interés, se movía por dinero. Estaba acostumbrada a escuchar palabras bonitas de hombres casados, de hombres que le demostraban que no tenían ilusión por la vida.
Carolina tenia 21 años, y se había convertido en tan solo tres años, en la mejor. En lo suyo, claro. Era una chica muy guapa, con una sonrisa especial. Su mirada trasmitía todo lo contrario de lo que sentía. Parecía que ella era feliz. Pero solo era un tatuaje, una fachada mas que ofrecer. ¿Por qué quien iba a querer acostarse con una mujer amargada? Tenia que fingir, y en eso, nadie le ganaba, era demasiado buena. Ya que se había dedicado a ello desde que nació.
Carolina era deseada por todos los hombres, ellos solo pensaban en ahorrar dinero para poder meterse entre las sabanas de su cama. Y las mujeres le odiaban, tanto las de su profesión como las demás, porque opinaban de ella que era una guarra. Solo sus escasos amigos sabían que Carolina no era feliz con ese tipo de vida, que hubiera dado su propia vida por tener la oportunidad de dedicarse a cualquier otra cosa. Pero las oportunidades son escasas y a sus 18 años no le salió ninguna, y el alquiler no le esperaba.
Y ahora, no podía salir de ese mundo, porque una vez que entras es demasiado difícil salir.

16 comentarios:

Nalda dijo...

Supongo que al final, luchando mucho, se consigue salir. Qué historia, se me ponen los pelos de punta.

Un besote

Anabel dijo...

Bufff!! Muy triste, pero la realidad supera la ficción. Carolina puede salir si se lo propone.

Unknown dijo...

Yo creo que saldrá.
Beso! :)

χαμόγελα dijo...

espero que salga :)me encanta como escribes =D

Patricia Nájera dijo...

buf... pues ojala salga, porque ese mundo no es mundo para una chica como Carolina, que se ve que rebosa vida pero se pone barreras :(

Angela dijo...

Al final siempre se puede salir de ese hueco en el qe estamos metidos no?

Víctor dijo...

empiezo a convertirme en un fan de carolina. Tan cruda, tan sincera consigo misma, tan real.

Vanille Galaxy dijo...

Me gusta Carolina :)

Beso!

Enrojecerse dijo...

lo peor de todo esto es que hay chicas que se sienten como Carolina.
en fin, supongo que todo es esperar al tiempo. :)

Elizabeth. dijo...

Coincido con la chica del comentario anterior, ahi mujeres que viven asi, ocultandose detras de una mascara de felicidad...
el salir de eso no es facil, tiene que poner mucha voluntad carolina para salir, y como ella misma define sus sentimientos no creo que sea capaz ahora a menos que ponga todo de si.


besos y precioso lo que escribiste.

Mariona dijo...

pobre carolina....


se ve que ella si tiene edad para hacer el amor...

Anónimo dijo...

Carolina creció demasiado rápido.

pájaro pequeño dijo...

Yo se que Carolina puede si quiere.

Ironía dijo...

Carolina necesita un buen trozo del pastel llamado "Felicidad"

¿Pero de quién va a ser el cumpleaños?

Carolina me gusta porque es una mujer con poder.
Es capaz de todo y más. Lo conseguirá!

P.D: Nosé si que he escrito. Hoy estoy un poco pirada.

Veró dijo...

carolina tiene fuerza, tiene todo, pero baf! se metio en lio equivocado. Si dejara de ponerse propios limites ella saldria con muchas mas facilidad.
Escribes genialisimo:D
Miles de abrazos Fukuro

For the heart i once had dijo...

Sabes? Si carolina no es fuerte, no sale adelante, y por lo tanto seguiría fingido lo que no es, y eso no la llevaría a ningún lado.
Se puede, se puede, te lo dice una chica que ha fingido estar bien, por más de 5 años.
Para mí, es raro decir que estoy bien, pero es mérito mio y eso no tiene precio. Le digo a carolina que no tenga miedo de luchar, el camino es muy largo, y en el camino, no sabes con lo que se puede encontrar ^^

Besos !